La bursitis: Una inflamación que afecta las articulaciones
La bursitis es un trastorno inflamatorio que afecta a las bolsas sinoviales, pequeñas estructuras llenas de líquido que reducen la fricción entre huesos, tendones y músculos. Las áreas más afectadas suelen ser el hombro, el codo, la cadera y las rodillas, aunque también puede presentarse en el pie, el tobillo o la zona isquiática.
¿Qué es la bursitis?
La bursitis es una inflamación de las bolsas sinoviales que puede causar dolor significativo y limitar la movilidad. Aunque generalmente no es grave, si no se trata adecuadamente, puede volverse crónica, afectando la calidad de vida del paciente. Los síntomas y tratamientos de la bursitis varían según su localización y severidad. Por ello, es esencial consultar a un especialista al notar los primeros signos de inflamación articular.
¿Cómo se origina la bursitis?
La bursitis ocurre cuando las bolsas sinoviales, esenciales para reducir la fricción entre huesos y tejidos, se inflaman. Esta inflamación puede deberse a movimientos repetitivos, posturas prolongadas, traumatismos o enfermedades subyacentes como la artritis. Es más común en adultos mayores y en personas que realizan actividades físicas intensas o repetitivas.
Factores de riesgo de la bursitis
Aunque cualquiera puede padecer bursitis, algunos factores aumentan el riesgo:
- Edad: Es más frecuente en adultos mayores.
- Profesiones o hobbies: Actividades como jardinería, pintura o tocar instrumentos musicales pueden desencadenar bursitis.
- Otras afecciones: Sobrepeso y enfermedades inflamatorias aumentan el riesgo, especialmente en caderas y rodillas.
Síntomas comunes de la bursitis
Si padeces bursitis, los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor o rigidez en la articulación afectada.
- Hinchazón y enrojecimiento.
- Dolor más intenso al mover o presionar la articulación.
- En casos graves, fiebre o incapacidad para mover la articulación.
Bursitis en el pie y el tobillo: Localización menos común
Aunque la bursitis suele afectar áreas como hombros o caderas, también puede presentarse en el pie y el tobillo. Esto puede impactar significativamente la movilidad diaria, dificultando caminar o permanecer de pie.
Bursitis en el pie
Esta condición suele localizarse en el talón, cerca del tendón de Aquiles, o en la base de los dedos. Sus causas incluyen:
- Uso de calzado inadecuado.
- Movimientos repetitivos, como correr.
- Traumatismos directos.
Bursitis en el tobillo
La bursitis en el tobillo afecta la parte posterior de la articulación, cerca del tendón de Aquiles. Sus causas más comunes son movimientos repetitivos, lesiones traumáticas y calzado con soporte insuficiente.
Diagnóstico y tratamiento de la bursitis
Un diagnóstico adecuado incluye un examen físico detallado y estudios de imagen. Los tratamientos comunes incluyen reposo, fisioterapia para mejorar la movilidad y fortalecer los músculos, infiltraciones con corticoides en casos graves y cirugía en situaciones excepcionales.
Prevención de la bursitis
Adoptar estrategias preventivas puede reducir el riesgo de bursitis:
- Utilizar rodilleras o almohadillas al trabajar en el suelo.
- Levantar objetos correctamente, doblando las rodillas.
- Alternar actividades físicas con períodos de descanso.
- Mantener un peso saludable para reducir el estrés en las articulaciones.
- Realizar ejercicios regulares para fortalecer músculos.
Tratamiento especializado en Clínica ITYOS
En Clínica ITYOS, ofrecemos un enfoque integral y personalizado para tratar la bursitis. Nuestro equipo liderado por el Dr. J. Ignacio Varo Rodríguez combina técnicas avanzadas con un trato cercano para garantizar una recuperación efectiva. Si experimentas síntomas de bursitis, no dudes en consultarnos. ¡Recupera tu movilidad con nosotros!